Desnutrición y Muertes por Falta de Servicios Médicos.
El pequeño vive en el barrio Las Piedras, el mismo lugar donde reside la familia del bebé de 56 días que falleció en forma súbita la semana pasada.
Cuando internaron al pequeño, la madre también estaba internada, y pocas horas después dio a luz a una niña que pesó 3,600 kilos al nacer.
La familia del niño internado vive en una casa precaria. Al trascender la noticia sobre su desnutrición, la oficina del Ministerio de Desarrollo Social (Mides) en Bella Unión se presentó en el hogar para conocer de cerca la situación.
"Ayer (por el martes) nos trajeron la canasta. Activaron (la ayuda) ahora, recién", señaló el tío de la criatura.
Bentancur dijo además que en el Mides perdieron las partidas de nacimiento de sus sobrinos, lo que impidió que se tramitasen antes los beneficios que aporta el organismo estatal a las familias carenciadas.
Según el semanario Integración, los responsables del Mides no brindaron muchos datos sobre este tema.
En cambio, una de las asistentes sociales que trabaja en esa secretaría de Estado reprochó: "No sé por qué la prensa se preocupa tanto por este tema siendo que el 50% de la población del pueblo Las Piedras tiene esa problemática".
En tanto, la representante del Mides en esta zona no quiso hablar con la prensa alegando estar trabajando en "otros temas más importantes".
Antecedente. Hace una semana, desde ese mismo barrio Las Piedras llegó ya muerto al hospital de Bella Unión un bebé de poco más de un mes.
El primer diagnostico fue que el niño murió por aspiración de vómitos, pero luego el forense detectó la desnutrición.
El informe policial estableció que la madre, al ingresar al nosocomio dijo que "a las 4 de la mañana le había dado de mamar, y a las 7 cuando se despertó, lo encontró muerto".
Los padres del niño quedaron emplazados, a la espera de una audiencia judicial.
Desde el Mides se intenta dar apoyo y examinar a los otros niños -hermanos del menor- que estaban a cargo de la madre del bebé y ver si también sufren de desnutrición.
Fuente: El País Digital
Emergencias Públicas Saturadas.
El aumento de las infecciones respiratorias volvió a saturar las puertas de emergencia de los hospitales públicos, provocando esperas de entre cinco y seis horas. Pacientes con diversas patologías y accidentes se ven a su vez impedidos de ingresar por esta situación, denunciado en varias oportunidades por la Cámara de Emergencias Móviles. Este problema es común en los hospitales Maciel y Pasteur, desde donde se derivan pacientes al Clínicas.
Eran las 12.15 de ayer cuando una ambulancia del Semm llegó a la puerta de emergencia del Hospital Pasteur con una paciente de 86 años. A las 17.15 cuando Ultimas Noticias arribó al lugar la mujer seguía esperando dentro del móvil para ingresar al centro hospitalario y la cola de ambulancias privadas y de Salud Pública alcanzaban las cinco unidades.
Diez minutos después de la llegada de la prensa la señora logró ingresar al centro hospitalario, ya que se había liberado una cama en la emergencia saturada.
"Hace cinco horas que estamos esperando", informó a Ultimas Noticias la médica del Semm, Alejandra Álvarez, que acompañaba a la mujer. "No es un cuadro de riesgo vital inminente, pero requiere la consulta con un cirujano y la toma de decisiones, o sea que debe ingresar al hospital. Aclaramos que cuando el riesgo de vida es inminente se ingresa al paciente de inmediato", agregó.
"Nosotros estamos trabajando, pero para el paciente y su familia es intolerable", indicó la médica. "Este problema lo hemos vivido en otros inviernos, pero cinco horas como ahora no nos había pasado", añadió.
En medio de la conversación con la médica llegó la hija de la señora, Lilián, que nerviosa le preguntó: "¿Hasta cuándo nos van a tener acá?, así no puede ser, mi madre está grave". La médica tratando de tranquilizarla le dijo: "Vamos a hablar de nuevo" y ambas ingresaron a la emergencia donde apenas se podía caminar por el pasillo.
Mientras tanto, Carmen, nieta de la paciente, afirmó a este matutino que la espera de su abuela a la puerta de la emergencia era "impensable" para un caso de "emergencia".
Carmen afirmó que su abuela estaba peor que cuando llegó al hospital debido a la espera. La nieta recordó cuando en junio del año pasado llegó al hospital con su abuelo y como no había ambulancia lo llevaron en la "fúnebre". "Esa vez estuvimos de las 9.00 a las 3.00 de la madrugada", afirmó.
En medio de la charla salió la hija y la médica diciendo que habían encontrado una cama para internar a la señora. Por la puerta de la emergencia asomaron los rostros preocupados de los funcionarios del hospital, que miraron a los representantes de los medios de comunicación.
Lilián, nerviosa, manifestó a que cuando llegaron al mediodía con su madre, en el hospital le dijeron que "no había lugar para ponerla y sin embargo llegó en coma".
Por otra parte, el chofer de la ambulancia señaló que cuando ellos llegaron al lugar había un móvil de Asse que hacía 6 horas que estaba esperando (llegó a las 7.00 y se fue a las 13.30). "El invierno pasado llegamos a estar 12 horas esperando en la puerta, es un disparate", afirmó el funcionario. En la segunda ambulancia apostada en la fila de la misma empresa privada de salud otra señora de 89 años esperaba su ingreso.
Su bisnieto Pablo manifestó a Ultimas Noticias que su familiar sufría de arritmia y se había desmayado. "Hace tres horas que estamos acá", indicó. "Pero mirá que yo los entiendo. Ahí adentro no cabe un dedal", afirmó el joven indicando la entrada de la emergencia. "Hay personas internadas en sillas y las camas están todas ocupadas", señaló Pablo.
Más atrás esperaban su turno más ambulancias del servicio 105 de la Administración de Servicios de Salud del Estado (Asse) por la calle Juan Cabrera, donde se encuentra la deteriorada puerta de la emergencia del histórico hospital.
Complicación compartida
La espera de las ambulancias es común a todos los hospitales. En el Clínicas se encontraban ayer a la tarde algunas en la puerta de emergencia pero estaban sin pacientes. Dos pertenecían al centro universitario y eran unidades de traslado.
Mario, chofer de una de ellas, manifestó a Ultimas Noticias que han llegado a esperar durante cuatro horas para ingresar un paciente.
"Hay que ponerse en el lugar del paciente. Además, es molesto porque el hospital cuenta con dos móviles para infinidad de servicios", indicó. Las ambulancias universitarias desarrollan entre 300 y 400 kilómetros por día.
Estas unidades no trasladan pacientes graves, en general sus traslados son con usuarios del hospital y entre instituciones. En las ambulancias del Clínicas trabajan tres funcionarios por unidad, un chofer y dos enfermeros y no hacen traslados de emergencia y urgencia.
Ultimas Noticias pudo saber que en la puerta de emergencia del Hospital Maciel sucede lo mismo.
Es así que la Cámara de Emergencias Móviles manifestó en su momento a este matutino que este problema se arrastra desde hace varios años durante el invierno.
Los empresarios destacaron que durante este año se han mantenido varias negociaciones al respecto, pero todavía no se alcanzó una solución.
Eran las 12.15 de ayer cuando una ambulancia del Semm llegó a la puerta de emergencia del Hospital Pasteur con una paciente de 86 años. A las 17.15 cuando Ultimas Noticias arribó al lugar la mujer seguía esperando dentro del móvil para ingresar al centro hospitalario y la cola de ambulancias privadas y de Salud Pública alcanzaban las cinco unidades.
Diez minutos después de la llegada de la prensa la señora logró ingresar al centro hospitalario, ya que se había liberado una cama en la emergencia saturada.
"Hace cinco horas que estamos esperando", informó a Ultimas Noticias la médica del Semm, Alejandra Álvarez, que acompañaba a la mujer. "No es un cuadro de riesgo vital inminente, pero requiere la consulta con un cirujano y la toma de decisiones, o sea que debe ingresar al hospital. Aclaramos que cuando el riesgo de vida es inminente se ingresa al paciente de inmediato", agregó.
"Nosotros estamos trabajando, pero para el paciente y su familia es intolerable", indicó la médica. "Este problema lo hemos vivido en otros inviernos, pero cinco horas como ahora no nos había pasado", añadió.
En medio de la conversación con la médica llegó la hija de la señora, Lilián, que nerviosa le preguntó: "¿Hasta cuándo nos van a tener acá?, así no puede ser, mi madre está grave". La médica tratando de tranquilizarla le dijo: "Vamos a hablar de nuevo" y ambas ingresaron a la emergencia donde apenas se podía caminar por el pasillo.
Mientras tanto, Carmen, nieta de la paciente, afirmó a este matutino que la espera de su abuela a la puerta de la emergencia era "impensable" para un caso de "emergencia".
Carmen afirmó que su abuela estaba peor que cuando llegó al hospital debido a la espera. La nieta recordó cuando en junio del año pasado llegó al hospital con su abuelo y como no había ambulancia lo llevaron en la "fúnebre". "Esa vez estuvimos de las 9.00 a las 3.00 de la madrugada", afirmó.
En medio de la charla salió la hija y la médica diciendo que habían encontrado una cama para internar a la señora. Por la puerta de la emergencia asomaron los rostros preocupados de los funcionarios del hospital, que miraron a los representantes de los medios de comunicación.
Lilián, nerviosa, manifestó a que cuando llegaron al mediodía con su madre, en el hospital le dijeron que "no había lugar para ponerla y sin embargo llegó en coma".
Por otra parte, el chofer de la ambulancia señaló que cuando ellos llegaron al lugar había un móvil de Asse que hacía 6 horas que estaba esperando (llegó a las 7.00 y se fue a las 13.30). "El invierno pasado llegamos a estar 12 horas esperando en la puerta, es un disparate", afirmó el funcionario. En la segunda ambulancia apostada en la fila de la misma empresa privada de salud otra señora de 89 años esperaba su ingreso.
Su bisnieto Pablo manifestó a Ultimas Noticias que su familiar sufría de arritmia y se había desmayado. "Hace tres horas que estamos acá", indicó. "Pero mirá que yo los entiendo. Ahí adentro no cabe un dedal", afirmó el joven indicando la entrada de la emergencia. "Hay personas internadas en sillas y las camas están todas ocupadas", señaló Pablo.
Más atrás esperaban su turno más ambulancias del servicio 105 de la Administración de Servicios de Salud del Estado (Asse) por la calle Juan Cabrera, donde se encuentra la deteriorada puerta de la emergencia del histórico hospital.
Complicación compartida
La espera de las ambulancias es común a todos los hospitales. En el Clínicas se encontraban ayer a la tarde algunas en la puerta de emergencia pero estaban sin pacientes. Dos pertenecían al centro universitario y eran unidades de traslado.
Mario, chofer de una de ellas, manifestó a Ultimas Noticias que han llegado a esperar durante cuatro horas para ingresar un paciente.
"Hay que ponerse en el lugar del paciente. Además, es molesto porque el hospital cuenta con dos móviles para infinidad de servicios", indicó. Las ambulancias universitarias desarrollan entre 300 y 400 kilómetros por día.
Estas unidades no trasladan pacientes graves, en general sus traslados son con usuarios del hospital y entre instituciones. En las ambulancias del Clínicas trabajan tres funcionarios por unidad, un chofer y dos enfermeros y no hacen traslados de emergencia y urgencia.
Ultimas Noticias pudo saber que en la puerta de emergencia del Hospital Maciel sucede lo mismo.
Es así que la Cámara de Emergencias Móviles manifestó en su momento a este matutino que este problema se arrastra desde hace varios años durante el invierno.
Los empresarios destacaron que durante este año se han mantenido varias negociaciones al respecto, pero todavía no se alcanzó una solución.
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| En la unión. En la tarde de ayer, varias ambulancias esperaban en la puerta de emergencia del Pasteur. |
Fuente: Ultimas Noticias
Hospitales Públicos en Situación Critica.
Denuncian Muerte de Persona que Falleció por Esperar 3 Días una Cama en el CTI.
caso testigo. Para graficar la situación y asegurando que no se trata de un caso aislado, el jefe del Servicio de Medicina del hospital, Jorge Burjel, presentó un caso que personalmente denunció a las autoridades de la salud.
Se trata de una paciente que murió en el Servicio de Urgencias, después de permanecer casi 36 horas aguardando una cama disponible en el CTI del hospital.
La carta que Burjel elevó a las autoridades establece que se trató de un caso "flagrante de asistencia médica inadecuada" y que si la persona hubiera estado afiliada a la mutualista "quizá podríamos haber salvado su vida".
"La salud es un derecho igualitario para todos los ciudadanos independientemente que tengamos la opción o la posibilidad económica de recibir asistencia en instituciones del Estado o privadas", afirma el médico en su carta.
Burjel aclaró que su denuncia pretende "que la situación se plantee a las autoridades de ASSE y del MSP" y que "reconozcamos públicamente que las cosas se están haciendo mal y este caso, como tantos otros que podría nombrar, están costando vidas humanas".
Al final de su carta, Burjel establece que si para continuar trabajando debe "admitir y hacerse cómplice" de "este tipo de hechos" que considera "no éticos y que van en contra de la vida de los enfermos", deja su cargo a "plena disposición" de la dirección.
Más allá del caso denunciado, Burjel aseguró que la problemática se extiende a diversas áreas del nosocomio.
"Las carencias del hospital son muy grandes y el tema no es nuevo", expresó.
"Cuando uno llega a la dirección la respuesta es que hay que cumplir con las ordenes que tienen de Montevideo, que tenemos que cumplir con esos mandatos, no podemos hacer más, ni gastar más", añadió y relató que la semana pasada solicitó una placa "de frente y perfil" pero autorizaron solamente una de esas posiciones.
"No doctor, no se puede porque hay que ahorrar", aseguró Burjel que fue la repuesta que recibió.
Fuente: El País Digital
MIDES Inefíciente.
La Auditoría Interna de la Nación (AIN) verificó "dificultades para asociar" los gastos rendidos por el Ministerio de Desarrollo Social (Mides) entre fines de 2008 y mayo de 2010 en relación a los fondos otorgados por el Mercosur para planes sociales. Durante ese período la titularidad del Mides fue compartida por las comunistas Marina Arismendi (2005-2010) y Ana Vignoli (2010-2011).
Según el texto, los convenios realizados con organizaciones de la sociedad civil (Oscs) no estipulan la naturaleza de los gastos permitidos, los resultados esperados, el cronograma de actividades y la descripción de productos asociados a tiempos y fondos. La objeción aborda el tratamiento dado a los recursos aprobados para el proyecto Intervenciones Múltiples en Frontera (Imaf) por U$S 1.411.768, de los cuales el Fondo para la Convergencia Estructural del Mercosur (Focem) aportó U$S 1.200.000 y la contrapartida local fue de U$S 211.768. El informe estableció que "la falta de los registros adecuados "impide controlar el uso adecuado de los recursos y medir el grado de cumplimiento de los objetivos del proyecto".
Se señaló, además, que a algunas de las Oscs que no cumplieron con lo estipulado se les rescindió el convenio, pero no se aplicaron las sanciones previstas. "Existen saldos pendientes de devolución. Se ha procedido a intimarles el pago pero no se han iniciado las acciones judiciales", se indicó. Se cotejó que se financiaron con fondos Imaf dos contratos de otro proyecto por un total de $ 95.911. En otro orden, la AIN subrayó que el plazo previsto de ejecución era de doce meses. En ese marco, al 31 de mayo del año pasado, fecha de cierre del informe, habían transcurrido 26 meses desde el primer desembolso, pese a lo cual solo se había ejecutado el 52% de las obras comprometidas. En ese sentido, se alertó que el retraso generaba el riesgo de que para culminar las obras proyectadas debería disponerse de financiamiento propio.
Sobre el rubro recursos humanos, materiales y equipos se informó que se gastó un 34% más de lo previsto en el proyecto, es decir U$S 178.186 de fondos Focem, lo que implica "un incumplimiento". La previsión de fondos Focem hasta la finalización del proyecto está estimada en U$S 328.047. Además, los gastos planificados para la finalización de las obras superan en U$S 116.651 lo aprobado.
En tanto, en el análisis de obras por localidad se destacó que en Bella Unión está en ejecución un salón de usos múltiples, con el contrato vencido del arquitecto a cargo. "Ante la eventualidad de cualquier daño, el Mides aparece como el único responsable", sostuvo el texto.
Mientras tanto, en el Chuy se constató la compra de materiales de construcción a través de Oscs con fondos asignados para otras actividades. En ese caso, se alertó que se desconoce la integridad de lo adquirido y sus importes, porque "no existe presupuesto y hay fondos pendientes de rendición". Además, se cuestionó el proceso licitatorio.
En Rivera se comprobó que los baños construidos no se pueden utilizar por falta de saneamiento, "lo que evidencia debilidades en la coordinación entre Mides y el Programa de Integración de Asentamientos Irregulares (Piai), del Ministerio de Vivienda". El 78% restante está sin finalizar, pese a lo cual se continuó entregando materiales a los beneficiarios "sin que existan garantías" de que no se destinen a otros usos. En los departamentos de Colonia y Paysandú también se registraron demoras.
Objeciones al Inca
La Auditoría Interna de la Nación (AIN) constató que el Instituto Nacional del Cáncer (Inca) contrató un servicio de ambulancias sin seguro, por lo que ante cualquier accidente el Inca debe afrontar las eventuales demandas.
Se alertó del traslado de pacientes no registrados por la falta de personal durante los fines de semana. Además, se estableció que durante varios meses de los años 2009 y 2010 se contrató un servicio de tomografías por un monto de $ 1.842.007 "sin planificación previa" y sin controlar los precios.
Según el texto, los convenios realizados con organizaciones de la sociedad civil (Oscs) no estipulan la naturaleza de los gastos permitidos, los resultados esperados, el cronograma de actividades y la descripción de productos asociados a tiempos y fondos. La objeción aborda el tratamiento dado a los recursos aprobados para el proyecto Intervenciones Múltiples en Frontera (Imaf) por U$S 1.411.768, de los cuales el Fondo para la Convergencia Estructural del Mercosur (Focem) aportó U$S 1.200.000 y la contrapartida local fue de U$S 211.768. El informe estableció que "la falta de los registros adecuados "impide controlar el uso adecuado de los recursos y medir el grado de cumplimiento de los objetivos del proyecto".
Se señaló, además, que a algunas de las Oscs que no cumplieron con lo estipulado se les rescindió el convenio, pero no se aplicaron las sanciones previstas. "Existen saldos pendientes de devolución. Se ha procedido a intimarles el pago pero no se han iniciado las acciones judiciales", se indicó. Se cotejó que se financiaron con fondos Imaf dos contratos de otro proyecto por un total de $ 95.911. En otro orden, la AIN subrayó que el plazo previsto de ejecución era de doce meses. En ese marco, al 31 de mayo del año pasado, fecha de cierre del informe, habían transcurrido 26 meses desde el primer desembolso, pese a lo cual solo se había ejecutado el 52% de las obras comprometidas. En ese sentido, se alertó que el retraso generaba el riesgo de que para culminar las obras proyectadas debería disponerse de financiamiento propio.
Sobre el rubro recursos humanos, materiales y equipos se informó que se gastó un 34% más de lo previsto en el proyecto, es decir U$S 178.186 de fondos Focem, lo que implica "un incumplimiento". La previsión de fondos Focem hasta la finalización del proyecto está estimada en U$S 328.047. Además, los gastos planificados para la finalización de las obras superan en U$S 116.651 lo aprobado.
En tanto, en el análisis de obras por localidad se destacó que en Bella Unión está en ejecución un salón de usos múltiples, con el contrato vencido del arquitecto a cargo. "Ante la eventualidad de cualquier daño, el Mides aparece como el único responsable", sostuvo el texto.
Mientras tanto, en el Chuy se constató la compra de materiales de construcción a través de Oscs con fondos asignados para otras actividades. En ese caso, se alertó que se desconoce la integridad de lo adquirido y sus importes, porque "no existe presupuesto y hay fondos pendientes de rendición". Además, se cuestionó el proceso licitatorio.
En Rivera se comprobó que los baños construidos no se pueden utilizar por falta de saneamiento, "lo que evidencia debilidades en la coordinación entre Mides y el Programa de Integración de Asentamientos Irregulares (Piai), del Ministerio de Vivienda". El 78% restante está sin finalizar, pese a lo cual se continuó entregando materiales a los beneficiarios "sin que existan garantías" de que no se destinen a otros usos. En los departamentos de Colonia y Paysandú también se registraron demoras.
Objeciones al Inca
La Auditoría Interna de la Nación (AIN) constató que el Instituto Nacional del Cáncer (Inca) contrató un servicio de ambulancias sin seguro, por lo que ante cualquier accidente el Inca debe afrontar las eventuales demandas.
Se alertó del traslado de pacientes no registrados por la falta de personal durante los fines de semana. Además, se estableció que durante varios meses de los años 2009 y 2010 se contrató un servicio de tomografías por un monto de $ 1.842.007 "sin planificación previa" y sin controlar los precios.
Fuente: Ultimas Noticias
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